Imaginate la escena: una reunión con la familia. Las risas inundan el lugar. Y en el centro de la velada, un olor inconfundible que lo domina todo: un espectacular pernil dorado, con la piel crujiente y una carne tiernísima que se corta con mirarla. Esa imagen es prácticamente la definición https://jacquesu628ybc7.theobloggers.com/profile